Quedan varios meses todavía para celebrar el Eurobasket, ¡y ya comienzan los preparativos! Las televisiones ya negocían con quienes tienen los derechos, Mediapro,
mientras la Federación ya está con los preparativos, ACB al margen por supuesto. Quedan por conocer los planes que tiene Pepu Hernández, unos planes que en principio no tienen porque cambiar respecto la última convocatoria pero que con el transcurso de la competición era de esperar que salieran nuevas proposiciones de cara a la selección de baloncesto.
Una vez más, quedan retratados aquellos que auguraban por la gran crisis del baloncesto español, una crisis fomentada por la contratación de jugadores extranjeros que cerraban las puertas a aquellos jugadores jóvenes con necesidad de oportunidades. Nada más lejos de la realidad. Los clubes cada vez son más profesionales y cada plaza que ocupa un jugador se ha convertido en un lujo sólo accesible para los elegidos. De ahí a que aquel jugador nacional que participe en un quinteto inicial sea indiscutible. O por lo menos que no genere dudas.
Han pasado cuatro meses desde el oro de Japón, un tiempo prudencial para ver quien rinde de la misma manera y quien merece tenérsele en cuenta. Jugadores que parecen quedarse estancados o que ejercen un papel diferente de su equipo de procedencia y otros que por juventud, calidad y motivación están dejando en evidencia a los más veteranos. Nuevas propuestas para la selección que suenan en la calle. Mario Fernández, Ricky Rubio, en los bases, Urtasun como escolta, San Emeterio y Carlos Suarez como aleros y Juanjo Triguero como pivot. Unas son propuestas sostenibles y otras son propuestas que carecen de solidez aunque disponen de argumentos para ellos.
Las tres propuestas reales e indiscutibles son en estos momentos Mario Fernández en la dirección, San Emeterio como alero y Triguero en la pintura, ésta última la veo menos factible, puesto que la pintura es lo más equilibrado posible, aunque un quinto pivot no está de más. Mario Fernández debe estar en el europeo porque sinceramente es tan joven y mucho mejor que Sergio Rodríguez, San Emeterio esta muy por encima de la media y además dispone de unas virtudes que no tienen los demás aleros en España. Por lo que se refiere a Triguero, mejora en mucho al hermanísimo, pero ahora mismo no hay nadie que lo discuta, por ser quien es y por como jugar como juega ahora.
Mario Fernández debe sustituir a Sergio Rodríguez. Principalmente porque el puesto de base en la selección española requiere de táctica y talento. El canario de los Blazers tiene mucho talento, tanto como inmadurez, falta de defensa y de lances del juego. Pierde muchas pelotas, es muy arriesgado y no es tan completo como el base del Gran Canaria que le disputa los minutos a todo un Marcus Norris que comienza su declive. Es un director de juego al que no se le debe exigir ni lanzamiento exterior ni tiros de campo. Selecciona muy bien los tiros, mueve bien el balón, pierde pocas posesiones y recupera bastantes. Un base que destaca por su colocación en el rebote largo, casi 5 rebotes por partido en estos momentos, y que como Navarro, es de los que mejor saben forzar las faltas personales a su oponente. A pesar de sus 23 años es toda una garantía.
De San Emeterio daría para todo un artículo. Definitivamente ha explotado. Es el ejemplo que deberían seguir jugadores como Triguero y Urtasun para crecer como jugadores. Aprender en sus equipos luchando por no perder para luego llegar al equipo grande con galones. El librito del Baskonia aplicado en la globalidad. Un librito tan criticado por
"el sindicalista" pero que bien haría en recomendar a los jóvenes jugadores. Actualmente es el mejor alero español, muy por delante de Berni Rodriguez, Carlos Jiménez y Mumbrú por ejemplo. Aporta físico, penetración y anotación desde cualquier posición, aunque le falta mejorar un poco el lanzamiento exterior. Sólo un poco. Estas son sus aportaciones para mejorar la selección española.
Juanjo Triguero es otra de las noticias más positivas de esta temporada. El hecho de tener como compañeros a Marcus Fizer y a Kevin Thompson parece haber sido el principal grado de motivación de este jugador tan grande como conflictivo. Si Marc Gasol comporta envergadura, Triguero aporta colocación, intimidación al contrario, mejores opciones de tiro, y la misma capacidad reboteadora que el hermanísimo. Si se clasifica con su equipo para la fase final de la Copa del Rey no descartaría que tuviera opciones en el draft este año, pero den por seguro que si su equipo se clasifica para play offs el año que viene estará en un grande. Podría ir al Baskonia, Pamesa, Unicaja y Barça.
Las propuestas menos sólidas son en primer lugar Ricky Rubio, principalmente porque se está adaptando a la élite, segundo porque no está jugando ni de base, ni de escolta. Juega para molestar a su contrario, lo que va bien para su formación, puesto que tácticamente es un privilegio. No comete apenas faltas personales pese a su intensa defensa y podría considerarse a su edad una propuesta real, pero, y enlazando con el tercer motivo, que carece de veteranía.
Txemi Urtasun es otra de las propuestas de la ACB que carece de momento por ahora. Su plaza está ocupada por Navarro y Rudy, una plaza totalmente inmejorable en estos momentos y que no le queda más remedio que progresar en el Bruesa para ir a parar a un equipo grande. No le queda otra salida. Aspirar a la selección ahora mismo me parece algo utópico. Y lo mismo equivale a Carlos Suarez, cuya primera temporada post-Jiménez está discurriendo de manera mucho más paulatina de lo que se pensaba. Puede ser un intento de protección al jugador puesto que la sombra de Carlos Jimenez es muy alargada, por ello tendrá su momento la temporada que viene de cara a aspirar a los Juegos Olímpicos de Pekin. Quizás con el lejano oriente como horizonte éstas últimas opciones sean consideradas como indiscutibles, de momento quédense con las perlas de Gran Canaria, Polaris y Akasvayu.
Foto: En portada, el espectacular tapón de Triguero a Fran Vázquez, cortesía del Blog de Juan Carlos