Un partido marcado por el orgullo

Esta tarde a las 19:45h en el Palau se juega uno de esos partidos considerados como final anticipada. Una hora antes de lo previsto, puesto que el horario de los partidos en el Palau es a las 20:45h, un horario que va muy mal pero no es excusa. Se trata del Panathinaikos de Zeljko Obradovic. Sí, ese equipo que hizo un recital de baloncesto en el OAKA frente al Barça. Sí, ese equipo que dispone de 15 jugadores de nivel en su plantilla. Sí, ese equipo que junto al TAU y el CSKA se convierte en el máximo candidato a ganar la Final Four en Atenas. Por eso y por varios motivos el partido de hoy, pese a ser intrascendente, hay que tomárselo en serio. Es importante.

El Panathinaikos se presentará sin Ramunas Siskaukas, y seguramente dará cancha a los jugadores menos habituales. Pero no se confien, los menos habituales podrían, perfectamente, estar en los play off de cuartos de final sobradamente. Significará la vuelta al Palau del que tendría que haber sido el líder del equipo de Dusko la temporada pasada. Milos Vujanic. Un jugador que llevo siguiendo desde hace mucho tiempo y del que sólo puedo señalar cosas positivas. Lástima de lesión de rodilla que le dejó la temporada casi en blanco y alejándole del Palau. Una decisión, por cierto, poco humana de Savic y que ha servido para reforzar el potencial de un rival directo. ¿Acaso hubiera molestado como tercer base?

También será el momento de ver a jugadores poco habituales como Robertas Javtokas, casi inédito en esta segunda fase, y de gran calidad, o ver al gran Dejan Tomasevic que vendrá hipermotivado al enfrentarse a un equipo dirigido por Dusko Ivanovic. Y de la misma manera podríamos destacar los minutos que puede tener el jovencísimo Dusan Sakota, atención a este jugador que es la última versión de jugador de 2.11 con una mecaníca letal desde cualquier posición. Se trata de un jugador internacional griego con pasaporte balcánico. Sakota será a Grecia lo que Gasol es al combinado nacional o Bargnani a la selección azzurra. Ya me entienden...

Estos jugadores forman parte de los que menos juegan. Pero serían titulares absolutos en cualquier equipo europeo. Una sensación en cualquier equipo competitivo de la ACB. Mientras aquí los aficionados se ilusionan con las aportaciones estériles de Marc Gasol , mientras que en el Panathinaikos disponen de un diamante como Sakota aún por pulir. El Panathinaikos es algo más que un equipo de estrellas rodeado de dos cojos (Becirovic y Vujanic). Es el equipo a batir.
A esto añadir la presencia de Diamantidis, la capacidad anotadora de Delk, el dominio de Batiste y el juego de espaldas de Dikoudis. Tendrán menos minutos pero estarán. Sólo por ello el Barça bien haría de sacar el orgullo y demostrar si se encuentra capacitado de tutear también en Europa.


El partido de ida en el OAKA




Foto: En portada, los jugadores del Panathinaikos en su única derrota en el OAKA de Atenas frente al Partizan.